Mi primer contacto con las profecías de Benjamín S. Parravicini surgió a raíz de una inquietud de una querida tía, residente en Neuquén, quien recibió de una amiga un anillado de fotocopias de la publicación de la revista "Conocimiento de la Nueva Era", editada en el año 1969, y que contiene 375 profecías. Aunque a ella le resultaba muy interesante su contenido, se le hacía difícil seguir un hilo conductor entre ellas, ya que se superponían acontecimientos y predicciones en diferentes épocas.

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En una de sus visitas familiares, me entrega esta publicación y me comenta su desconcierto con respecto a la misma. Este hecho me provoca mucha curiosidad, y le propongo hacerle un trabajo de reordenamiento de las profecías.

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Este estudio se ordena en seis secciones:

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• EN LA PRUEBA

 

• EN EL FINAL DE LA PRUEBA

 

• DESPUÉS DE LA PRUEBA

 

• EL FINAL DE FINALES

 

• EL PRINCIPIO EN LA LUZ

 

• LAS TRES HORAS

 

 

La Prueba parecerìa abarcar un período de varios años que comenzaría en el 66 o 70, y cuyo cierre se daría, aproximadamente, en el  año 2000, aunque, en los mensajes proféticos, las fechas son estimativas y no fijas; el hecho de que un mensaje profético no se cumpla con exactitud en la fecha prevista, responde a factores muchos más amplios, sin que el mismo pierda su esencia. Con respecto a este punto, Sixto Paz Wells escribe en su libro La Antiprofecía :  “ A través de esos mensajes (proféticos) se ha reiterado en varias oportunidades que el ser humano puede cambiar el futuro negativo, y que el hecho de conocer las profecías es una suerte de advertencia para corregir los desaciertos, porque generando nuevas causas positivas se puede modificar cuanto ha sido anunciado “ (pág. 192)

 

El final de la Prueba se daría, como se dijo, aproximadamente en el 2000, y daría comienzo la segunda etapa, es decir, los Tres Humos, el Gran Trueno y el Final de Finales, etapa que tendría su culminación en el año 2002, año clave que dió Parravicini para el despertar de la Luz.

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